Por Omarys Santiago Torres
Nicole Hernández, actual coordinadora de Asuntos Académicos del programa Upward Bound en la Universidad del Sagrado Corazón, sirve desde su experiencia como estudiante de primera generación. Es decir, son los(as) primeros de sus familias en realizar un grado universitario.
«Fue un reto (estudiar) pero al mismo tiempo fui guiada y motivada por mi familia para que lo lograra, con ello marqué un precedente y luego varios familiares han cursado estudios universitarios», dijo la exalumna de Sagrado.
Una lección que pone al servicio de los(as) 82 jóvenes, de cuatro escuelas públicas en la Isla, que tiene a su cargo, para orientar en pro de sus metas académicas. Sin olvidar, a aquellos(as) que la guiaron en su momento.
«Tuve un sinnúmero de líderes que me dieron la mano. Ahora yo he tomado ese rol, soy la guía para estos participantes de Upward Bound», mencionó a inSagrado.
Upward Bound es un programa subvencionado con fondos federales del Departamento de Educación federal. Su objetivo es proveer a los(as) estudiantes de las escuelas superior participantes las destrezas académicas necesarias para que culminen con éxito su escuela superior. Además, se les asiste para que sean admitidos(as) a estudios post-secundarios.
Ahora bien, Nicole reconoció que tuvo desafíos, el transporte, por ejemplo, y cómo lidiar con lo económico o educativo al ser una estudiante de primera generación. Desafíos que superó gracias a Sagrado que tiene ayudas financieras, emocionales y de apoyo al servicio de sus estudiantes.
“Con la determinación y el apoyo adecuado se pueden superar las barreras educativas y económicas”, concluyó la también mentora en Upward Bound.
El Programa de Apoyo al Estudiante (PAE) celebró el 8 de noviembre el «First Generation Day», junto a las unidades de Apoyo Académico, Persistencia Estudiantil y los programas Upward Bound y Habilidades+, que atienden a la población.